Pew Hosts Open Discussion in France on Ending Overfishing

La Unión Europea tiene de límite el año 2020 para acabar con la sobrepesca en sus aguas, y The Pew Charitable Trusts celebró una mesa redonda en Francia (un estado pesquero clave de la UE) para valorar los avances en la consecución de ese objetivo. El límite se fijó en el marco de la revisión de la Política Pesquera Común (PPC) en 2013.

Francia, con actividad pesquera en el océano Atlántico nororiental, el mar del Norte y el mar Mediterráneo, representa alrededor del 10 % de las capturas anuales de la UE y desempeña un papel político decisivo en las negociaciones del Consejo de la Unión Europea.

El 9 de octubre, una veintena de expertos en pesca de Francia se reunieron en la Maison des Océans de París para estudiar los avances en el cumplimiento del límite. La mesa redonda, que incluía científicos, pescadores y representantes del gobierno francés y de organizaciones no gubernamentales fue una primicia para el país, donde lo habitual es que la gestión de la pesca se debata a puerta cerrada.

Pew organizó la sesión en colaboración con el Instituto Oceanográfico de Mónaco como una oportunidad para que los participantes debatieran sobre una paradoja relacionada con las poblaciones de peces del Atlántico nororiental: Desde 2013 los países pesqueros de la UE han realizado avances considerables hacia la consecución de una gestión sostenible de estas poblaciones de peces, pero siguen quedándose cortos respecto al objetivo de la PPC de acabar con la sobre pesca para 2020.

Sin embargo, dentro de la UE hay variedad de opiniones sobre ello y sobre cómo alcanzar el objetivo antes de la fecha límite. Didier Gascuel, profesor especializado en pesca de la institución AgroCampus Ouest de Rennes, Francia, abrió la mesa redonda con una exposición en la que se mostraba que la presión pesquera del Atlántico nororiental se ha reducido casi a la mitad en 20 años y que algunas poblaciones de peces se están recuperando, lo que tiene como resultado una creciente biomasa (el peso corporal de todos los peces de una población concreta en el agua). Sin embargo, la mayoría de las poblaciones de peces de esa región siguen siendo  sobreexplotadas y estos últimos años, la mejora parece haberse estancado..

Hubert Carré, director del Comité Nacional de Francia para Pesquerías y Comunidades Marinas, informó a los participantes de que había que poner en perspectiva la posibilidad de que se incumpla el límite de 2020. El sector de la pesca ha puesto su empeño en avanzar hacia el objetivo de la PPC de obtener el rendimiento máximo sostenible ([1}el mayor rendimiento (o captura) que se puede obtener de una población durante un período de tiempo indefinido{2]), un empeño que podría fracasar debido a las dificultades relacionadas con otras medidas legislativas, como la obligación de desembarque de las capturas que entrará en vigor en enero de 2019.

A continuación, Frédéric Gueudar Delahaye, director de la Administración Francesa de Pesquerías, señaló que el principal reto de la UE es avanzar en el cumplimiento del límite de 2020 al tiempo que se consideran las consecuencias socioeconómicas que tendrá para las flotas el hecho de que se establezcan unos límites de pesca de acuerdo con las recomendaciones científicas.

Después, el debate se centró en los riesgos que plantea un enfoque de dos niveles. Al desviarse de las recomendaciones científicas en el caso de las poblaciones de peces consideradas de menor importancia económica o menos conocidas, los ministros se están apartando de su obligación legal: la erradicación de la sobrepesca de todas las poblaciones para 2020. También se hizo hincapié en la falta de indicadores relevantes para supervisar con eficacia el avance hacia los objetivos de la PPC, especialmente en la cuestión de la biomasa de las poblaciones.

El franco debate entre los participantes nos permitió profundizar en estos temas y abordar dos problemas especialmente importantes para Francia.

Uno fue el del plan plurianual (MAP) para las aguas occidentales de la Comisión Europea, que fija los límites de captura y otras políticas para el Atlántico nororiental. Se trata de un plan crucial para el sector francés de la pesca porque alrededor de dos tercios del pescado capturado por buques franceses en aguas de la UE se extraen en esta área. Por desgracia, la propuesta de la Comisión (de modo más negativo tras las enmiendas adoptadas por el Parlamento Europeo después de la celebración de la mesa redonda) permitiría que la pesca superara los límites indicados en la PPC. Si eso ocurriera, se impediría la recuperación de las poblaciones de peces hasta niveles saludables y, a largo plazo, se produciría un impacto socioeconómico negativo.

El otro problema importante para Francia es la pesca de determinadas especies de aguas profundas. Este otoño, los ministros de Pesca europeos decidirán los límites de captura de 20 poblaciones de peces de aguas profundas para 2019 y 2020. Las especies de aguas profundas son especialmente vulnerables a la explotación porque viven muchos años y maduran de forma tardía, por lo que la pesca puede extraer del agua muchos especímenes que todavía no han tenido ocasión de reproducirse.

Entre estas especies, el sable negro, el granadero y el besugo son especialmente populares entre los consumidores de Francia, Portugal y España. Sin embargo, los peces de aguas profundas solo supusieron el 0,3 % de los desembarcos en la UE de 2016, dentro de los cuales España representó el 41 %, Portugal, el 33 % y Francia, el 22 %. A pesar de la vulnerabilidad y la poca importancia económica de estas especies, los ministros no han dejado de fijar límites de captura que superan los establecidos por las recomendaciones científicas. En 2016, 15 de 20 límites de captura se fijaron por encima de los niveles recomendados como hemos mencionado anteriormente. Esto sigue una inquietante tendencia: Los ministros de Pesca han incumplido sistemáticamente los objetivos que ellos mismos se han fijado, lo que hace que resulte improbable que la UE cumpla con el límite de 2020 a no ser que este año se produzca un avance considerable en las reuniones del Consejo.

Los principales países pesqueros, como Francia, deben liderar la batalla por la consecución del objetivo de 2020 de fijar unos límites de captura que sigan las recomendaciones científicas. El aumento en la transparencia de los procesos y las deliberaciones del Consejo resulta fundamental porque ayudará a las partes interesadas a exigir responsabilidad a los ministros.

La mesa redonda de París fue un paso importante en este sentido, por lo menos en Francia, porque centró la atención en las próximas iniciativas de los funcionarios del sector pesquero del país. Pew insta al ministro de Pesca y a sus homólogos a que tomen las decisiones adecuadas en estas reuniones que el Consejo celebrará en otoño para poner fin a la sobrepesca, lo que beneficiaría a largo plazo a las pesquerías de la UE y a todos aquellos que dependen de ellas para su trabajo, sus ingresos y su sustento.

Jean-Christophe Vandevelde trabaja en las iniciativas de The Pew Charitable Trusts para acabar con la sobrepesca en el noroeste de Europa.