La Comisión Europea publicó el 3 de octubre su propuesta de límites de captura, conocida como Total Admisible de Capturas (TAC), para las poblaciones de peces de aguas profundas que en 2015 y 2016 serán objeto de pesca por parte de los buques de la Unión Europea.
Las especies de peces de aguas profundas, como el reloj anaranjado, el granadero, la maruca azul, el Zenopsis nebulosa y el Cyttus australis, son especialmente vulnerables a la sobrepesca, ya que en general viven más tiempo, crecen más lentamente, maduran más tarde y tienen menos crías que muchas otras especies. Además, varias poblaciones de peces de aguas profundas del Océano Atlántico nororiental ya han sufrido reducciones considerables.
Para la mayoría de las poblaciones de peces, la Comisión ha propuesto unos límites acordes con los dictámenes científicos y con la nueva Política Pesquera Común. Para otras, no obstante, especialmente para las poblaciones de besugo y granadero, ha propuesto unos límites de captura que, de ser aprobados por los ministros de pesca de la UE, no bastarán para conservar dichas poblaciones.
"Pew insta a los ministros de pesca de la UE a fijar unos límites de captura para las poblaciones de peces de aguas profundas que ayuden a acabar con la sobrepesca en 2015. Solo deberían permitir retrasos en esta fecha límite en caso de demostrarse que esas medidas destinadas a acabar con la sobrepesca de una especie determinada supondrían un riesgo grave para la sostenibilidad social y económica de las flotas pesqueras implicadas", afirmó Uta Bellion, directora del Programa Marino Europeo de The Pew Charitable Trusts.
En noviembre, el Consejo de Ministros de Pesca, formado por los 28 ministros responsables de la pesca de los Estados miembros de la UE, estudiará los totales admisibles de captura (TAC) propuestos. En sus deliberaciones, los ministros podrán acordar realizar cambios en los límites propuestos para cualquier población de peces.
Los ministros de pesca también han estado estudiando desde enero de 2014 una propuesta de la Comisión Europea relativa a las aguas nororientales del Atlántico que exigiría el establecimiento de unos límites de captura estrictos para las especies de aguas profundas, la realización de evaluaciones de impacto medioambiental y la eliminación progresiva de las prácticas pesqueras más destructivas, como la pesca de arrastre de fondo.
"Los ministros de la UE deberían adoptar sin tardanza reglamentos que protejan algunos de los ecosistemas y las especies más vulnerables del entorno marino", afirmó la Sra. Bellion. "Instamos a Italia, que ostenta en este momento la presidencia rotatoria de la Unión Europea, a asumir su liderazgo en relación con estas cuestiones."
A principios de este año, un estudio publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences de Estados Unidos concluyó que la pesca de arrastre de fondo representa una amenaza de primer orden para los ecosistemas de los fondos marinos de aguas profundas de todo el mundo. Según el estudio, este método pesquero "convertirá amplias áreas de los taludes continentales de profundidad en desiertos inhabitables para la fauna y en paisajes marinos altamente degradados".